Cuando comencé con este proyecto, no pude dimensionar correctamente el desafío al que me enfrentaba!
Si bien sabia de antemano que iba a trabajar con WPBakery, cometí el grave error de asumir que sería algo similar a Elementor, con el cual vengo desarrollando sitios hace tiempo.
Para los que no estén muy empapados en el tema, tanto Elementor como WP Bakery son constructores que se usan en WordPress para diseñar sitios, algo así como unos programas que se utilizan para armar las estructuras de las páginas y sus contenidos.
Cuando empecé, lo primero que se me ocurrió hacer, es instalar de todas formas el Elemetor, y tratar de editar las páginas de WPBakery ahi mismo… Gravísimo error, como era de esperarse se rompió todo! marcha atrás en el plan.
A medida que iba avanzando con WPBakery, no solo notaba que las diferencias eran muchas, si no que el tiempo que se me iba investigando, no había sido estipulado en el presupuesto original… Y aquí comienza el dilema de todo diseñador/desarrollador: -Y ahora qué hago?
Entonces llegó un punto -un poquito avanzado en el proyecto- donde tuve que replantearme que hacer…
Si dejaba ahora, todo el tiempo y esfuerzo invertidos hasta el momento se perderían!
pero si seguía así… un poco a ciegas, sin mucho material en internet donde investigar, sin conocidos familiarizados con este constructor a quién preguntarles, sin muchas opciones realmente, no sabía como podía terminar y sobre todo si seria capaz de finalizar el proyecto.
Como todo al principio, parece fácil y de pronta resolución, hasta que en un momento: -BOOM!
todo estalla por los aires, las ganas de seguir, la paciencia, la confianza…
Me planteé seriamente que hacer y si seria capaz de resolver lo que WPBakery me ocultaba todo el tiempo… (si, esto ya era personal, “me ocultaba”)
En serio, nunca vi un constructor tan rebuscado… hasta sentí que era una conspiración para no dejarme avanzar en mi camino jajaja
pero resolutiva como soy, luego de quejarme a mansalva con todos mis amigos, familiares y conocidos -una tiene que descargarse también- puse manos a la obra y día tras día me propuse ir conquistando pequeñas metas: me enloquecía ver como en cualquier otro constructor con un simple click se solucionaba algo y aquí no… nooooo
aquí debía tocar un botón que me llevaba a otra página, donde luego de entrar en un editor oculto y encontrar un código secreto, lograba finalmente cambiar el color de la tipografía… que aventura !!!
Poco a poco me fui familiarizando con los procedimientos y avanzando en el sitio, me gustaría decir que rápidamente, pero no fue el caso!
lo bueno era que mi confianza de lograrlo aumentaba con las metas que iba conquistando y esto me preparaba para escenarios inimaginados, donde por ejemplo, el cliente me pedía cambios!!
-claramente no sabia por el calvario que estaba pasando…-
Los días pasaron, los meses también!
Al abrir WordPress sentía que estaba ingresando en una dimensión desconocida y misteriosa, pero luego de persistir estaba por lograrlo.
Finalmente pude presentar una versión digna del sitio y hacer los cambios pedidos, estaba llegando a la meta final, lo había logrado! pero de repente:
-Nos gustaría que la web fuese bilingüe!
Horrorrrrrr casi como el que se experimenta en estos días, con la llegada de Halloween o la noche de los muertos!…
Todo tipo de pensamientos pasaron por mi cabeza: y si el plugin no funciona, y si la tengo que duplicar a mano, y si se rompe todo!????
Qué hacer ahora? bueno: el paso más lógico e inteligente que todo desarrollador debe seguir según protocolo: un backup!
Por lo menos si todo estalla por los aires, el sitio estará a salvo.
Por suerte -y con todo el conocimiento adquirido- esta etapa fue un poco más amena, amena del todo no, pero bueno, ya nos quejamos lo suficiente en los párrafos anteriores.
Los últimos días del proyecto transcurrieron chequeando y pasando el contenido a mano, que gentilmente me entregaron las chicas de moon, que cabe hacer una mención aparte: pasaron todo el material en perfectas condiciones, ordenado, clasificado…
Debo admitir que si bien la parte de construir el sitio fue una pesadilla, tener unas clientas tan organizadas y expeditivas lo fue convirtiendo en apenas un mal sueño y hoy en un gran experiencia.
Porque como de todo se puede aprender… yo aprendí un montón:
- Si la vida me lo permite, no voy a volver a usar WPBakery! (salvo que se apiaden de las pobres almas de los diseñadores y lo hagan un poco más intuitivo)
- Es invaluable la ayuda que te pueden dar tus amigos programadores en estos casos… si bien no pueden resolver los conflictos, están ahi para razonar con vos por qué nada funciona bien en ese constructor
- Agregar una cláusula en el presupuesto que diga que, si el sitio necesita -por alguna extraña razón- ser construido con WPBakery, tendrá un % de recargo por toda la mala sangre que uno tiene que hacerse al investigar -no encontrar nada-, preguntar -no obtener respuestas- razonar, -tampoco obtener respuestas- …
Para concluir, ahora si, seriamente, quiero agradecer a las chicas de agencia moon que confiaron en mi para armar su sitio, a martín, ese genio programador, que siempre está cuando lo necesito y un poquito a mí, que aunque los problemas aparecen y seguirán apareciendo, no aflojo y trato siempre de encontrarles la mejor solución.
Ojalá que siempre pueda seguir investigando, resolviendo y creciendo de la mano del diseño.
Ahora si, el link del sitio: https://moon-creativo.com/